En el Día del Genocidio Selk’nam, la descendiente del pueblo Selk’nam, Margarita Maldonado, llamó a reforzar la memoria histórica y a incluir la verdadera historia de los pueblos originarios en las escuelas. En diálogo radial, remarcó que la fecha recuerda las matanzas ocurridas en Tierra del Fuego —iniciadas con la expedición de Ramón Lista en San Sebastián— y sostuvo que “somos un pueblo vivo, no un pueblo exterminado”.
Maldonado lamentó que muchos estudiantes disfruten el feriado “sin saber por qué” y advirtió que la provincia aún no adhirió a la ley del idóneo, lo que impide que educadores ancestrales transmitan su conocimiento en las aulas. “Trabajo hace años visitando escuelas, pero sin título docente se complica. Sería fundamental que la educación intercultural bilingüe esté en el diseño curricular”, afirmó.
Al explicar el origen de la fecha, recordó que la primera matanza “está registrada a 80 kilómetros de Río Grande”, cuando la expedición encabezada por Lista abrió fuego contra un grupo Selk’nam. “Hubo genocidio, no exterminio —aclaró—. Nuestros ancestros vivían, caminaban y celebraban en estos lugares. La historia no se borra”.
También detalló hechos ocurridos en otros puntos de la isla, como Cabo Peña, Punta María y Cauchicol, donde distintos grupos Selk’nam fueron asesinados. “El desastre que se hizo en nuestra isla fue muy triste. Hay mucha documentación que salió a la luz con los años y demuestra que lo que vivimos fue atroz”, dijo, mencionando a figuras como Popper y McLennan entre los responsables.
Asimismo, Maldonado pidió recuperar toponimias originarias —como Carquenchubón, nombre Selk’nam del Lago Fagnano— y defender el legado cultural de su pueblo: el arte, la espiritualidad de las ceremonias, la alimentación y las prácticas ancestrales. “Lo peor es repetir sin saber. La ignorancia lastima. Lo más importante es que alguien continúe este trabajo para que la memoria siga viva”, expresó.
Finalmente, agradeció el acompañamiento a lo largo de los años y dedicó un momento a recordar al historiador Carlos Vega Delgado, fallecido recientemente. “Era un maestro y un amigo. Las personas que mantuvieron viva la historia deben ser honradas”, concluyó.