El presidente de Río Grande Activa, Juan Pablo De Luca, destacó el salto productivo que logró la ciudad en los últimos años y afirmó que “la producción local de alimentos es una prioridad de la agenda global”. El funcionario explicó que la demanda internacional y la necesidad de reducir costos han convertido a la soberanía alimentaria en un eje estratégico para los gobiernos locales y los sectores productivos.
De Luca recordó que en 2021 Río Grande apenas producía el 2% de los alimentos que consumía, mientras que hoy alcanza el 10% luego de “un trabajo muy arduo impulsado desde el municipio y acompañado por inversiones estratégicas”. En ese proceso, aseguró que la mayor parte de la inversión actual proviene del sector privado, ya que el Estado local “muestra el camino, facilita, da asistencia técnica y realiza aportes clave en equipamiento”.
El titular de la Sociedad del Estado explicó que las restricciones financieras obligaron a modificar el plan de negocios. “Este año el municipio no pudo hacer el aporte de capital de 70 millones de pesos por la situación económica”, señaló, y detalló que esa limitación derivó en una estrategia centrada en nuevos acuerdos con grandes clientes como Total Energies, Newsan, La Anónima y Vitalcan. Según indicó, estas empresas incluso realizan auditorías de calidad para potenciar a Río Grande Activa como proveedor regional.
En cuanto a la expansión comercial, De Luca reveló que la producción local ya llegó por primera vez a la Antártida a través de ventas a cruceros, en un trabajo conjunto con carnicerías de Ushuaia. “Estamos planificando un canal fuerte vinculado al comercio marítimo, mostrando que se puede hacer, con continuidad y seriedad”, afirmó. Sin embargo, reconoció que la falta de financiamiento demoró obras clave, como la puesta en marcha de la incubadora de pollitos en convenio con la UTN, debido al alto costo de la infraestructura sanitaria exigida.
Al analizar la caída del consumo y el impacto de las importaciones, el funcionario sostuvo que “las ventas entre mayo y octubre fueron muy malas” y advirtió que las importaciones de pollo aumentaron un 325% desde Brasil, afectando directamente a los productores locales. Ante ese escenario, explicó que Río Grande Activa extendió los plazos de cobro a comercios de 7 a casi 50 días, “porque teníamos espalda para hacerlo y porque también logramos acuerdos con nuestros proveedores para estirar los pagos”.
De Luca también detalló los avances del sector frutihortícola, donde ya se ofrecen más de seis variedades de tomate, además de frutillas y ajos violetas. “Para todos es una salida importante la producción de alimentos”, subrayó. Asimismo, confirmó que para 2026 se propone una capitalización estatal de 89 millones de pesos, aunque condicionada a la situación financiera municipal.
Finalmente, se refirió al proyecto del matadero municipal y aseguró que la modernización avanza mediante aportes del sector privado. “Son pasos que se van dando con continuidad y trabajo conjunto, con privados que confían en nosotros”, indicó, mencionando mejoras como una nueva caldera y la renovación del techo. “Es un camino que no se hace de un día para otro, pero que ya tiene resultados concretos para mostrar a la comunidad”, concluyó.